lunes, 5 de marzo de 2012

La Comunidad de Madrid compra 85 Has., en la Finca de El Garzo

Según el comunicado de prensa del Gobierno de la Comunidad de Madrid, del pasado 1 de marzo, se han comprado 85 hectáreas a un particular para engrosar el proyecto de Club de Campo del Noroeste en la Finca de El Garzo.




Tres cuestiones sobre la nota de prensa.


La primera, su coste de 260.898 euros, esto es, 3.069,39 euros la hectárea.


La Comunidad que recorta nuestro derecho ciudadano a la educación y a la sanidad, amén de en otras políticas sociales relevantes para la calidad de vida y el bienestar de los madrileños y madrileñas, dedica tal cantidad de dinero a un proyecto de inversión privada con un monto de 35 millones de euros.


Sí, hay dinero, pero para sus negocios.


La segunda, la creación de empleo. La Comunidad fija en 800 puestos de trabajos el empleo que se creará con el Club de Campo del Noroeste.


Se trata de una falacia. Desconozco cómo se habrá cuantificado el número de puestos de trabajo, pero hay que considerar que dos tercios de ellos tienen que ver con la construcción del propio Club de Campo, esto es, un empleo temporal. Por lo que respecta al empleo que generará directamente la explotación mercantil del Club de Campo es necesario hacer saber que se trata de un empleo de baja cualificación y, por tanto, con una baja remuneración.


Se utiliza la coartada del elevado desempleo que sufrimos en la Comunidad de Madrid, que se sitúa según datos de la Encuesta de Población Activa del cuarto trimestre del año pasado, en un 18,5% de la población activa y con una tendencia al crecimiento a lo largo de este año por la coyuntura de recesión económica en la que nos hayamos inmersos, para un desaguisado ecológico y medioambientalmente inasumible para nuestro municipio, que cuenta con un magnífico entorno natural que debería ser objeto de la máxima protección legal y no objeto de tráfico mercantil, tal y como proyecta la Comunidad de Madrid con el beneplácito del Equipo de Gobierno de nuestro municipio.


La tercera, la coartada de la mejora del medio ambiente, aludiendo a los campos de biogolf, la plantación de cinco mil árboles, la introducción de ejemplares de fauna autóctona y la preservación de la fauna aviar.


La construcción del Club de Campo conllevará el diseño, construcción y, posterior, mantenimiento de tres campos de golf, con el consiguiente impacto medio ambiental y ecológico sobre el suelo.


Además, el abundante riego que precisan las calles de los campos de golf y, especialmente los greens, suponen un sobresaliente gasto en agua corriente, que argumentan que será reciclada. Otra falacia: no existe una depuradora de aguas en nuestro municipio capaz de tratar tal ingente cantidad de agua reciclada. La estación depuradora de aguas residuales proyectada en el Plan General de Ordenación Urbana de Las Rozas no contempla el Club de Campo, si no las necesidades de la población urbana de nuestro municipio, cuyo crecimiento ha saturado las estaciones depuradoras existentes.


Los campos de golf serán regados con una agua corriente del Canal y no será agua reciclada. De biogolf, nada de nada.


La previsión de 400.000 visitantes anuales y la consiguiente necesidad de infraestructuras, tales como plazas de aparcamiento, conllevará un grave impacto ecológico en la zona, sobre todo para la fauna y la flora. No debemos olvidar que la Finca de El Garzo está ubicada en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y que es zona de transición del monte de El Pardo, por lo que será inevitable el inicio de un proceso de degradación constante, tanto del Parque Regional como del propio monte de El Pardo.


El proyecto de Club de Campo es un conjunto de falacias que sólo pretende el lucro privado, no olvidemos que tal es el carácter de la inversión prevista, a costa de los intereses de los vecinos y vecinas de Las Matas, en particular, y de Las Rozas en general.

1 comentario:

hebert - casas en venta dijo...

vaya eso si que son bastante hectarias...